Rosa, no te asustes cuando desaparezca.
Te escribo esta carta para contarte cómo
ocurrió todo y por qué .
Será mejor que no les cuentes nada a los
otros niños de la clase. Los que entienden ya lo saben y los que no…creo que es
mejor así.
Verás, hacía ya días que tenía un
problema pero no podía contártelo. Lo intenté, de verdad que sí pero cada vez
que iba a abrir la boca para decirte que…
Bueno mejor empezaré por el principio: La
silla no era una silla ni la mesa ni los libros y , no te enfades Rosa, pero me
temo que tu tampoco eras una profesora.
El malvado Cono os había transformado a
todos en sus esclavos y me teníais secuestrado. Solo me dejaban salir media
hora al día pero aún entonces no me quitaban ojo de encima.
En el patio de recreo había mas esclavos que
se dedicaban a controlarme, me obligaban a jugar al futbol y si no lo hacía se
reían de mi y me llamaban “niña”. Así que con el tiempo me hice amigo de
Claudia de 2ºB.
Un día Claudia me contó que en clase de
mate vio a Cono escondido
detrás de una división y cuando intentó defenderse de él solo consiguió que le
salieran todos los cincos del revés lo que fue mucho peor porque su profesor
habló con sus padres y les convencieron para que la enviaran por las tardes a
otra clase de mates donde, no lo creerás Rosa, pero también allí había esclavos
de Cono.
Claudia y yo aprovechábamos la media hora
de libertad para planear nuestra fuga.
_ Lo haremos en Sociales- decía Claudia.
_No, creo que es mejor en plástica- le
contesté yo.
_¿Seguro? Pablo, en Sociales podríamos
viajar a cualquier lugar del mundo, elegir una isla del pacífico, los pirineos
nevados…
_ Si, pero solo tenemos fotografías en
libros, no nos dejaran ni siquiera ver un documental en la sala de video, ya
sabes que vigilan cualquier movimiento. Es mejor en plástica, podríamos dibujar
lo que queramos incluido el reloj mágico para teletransportarnos.
Me alegro de haberle hecho caso a Claudia
y de que ella confiara en mi.
Rosa, hay tantas cosas que aprender y tan
poco tiempo…
El reloj funcionó .
Aquí no esperamos que suene el timbre ni
nos preocupan las notas. Hace siempre el mejor tiempo, unas veces llueve otras
hace calor y otras frío, dependiendo del viento y de las mareas, lo
aprendimos observando .
Ah! Las tablas de multiplicar nos sirven
para poder contar las estrellas que se ven desde nuestra cabaña en la playa.
Pablo
P.D. No intentes buscarnos. Aquí solo se puede llegar con la imaginación.
P.D. No intentes buscarnos. Aquí solo se puede llegar con la imaginación.
Surrealista y fantástico. El mejor que te he leido hasta ahora, felicitaciones.
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